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JONÁS

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Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.

El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.Ezequiel 47. 1Zacarias 14. 8

Juan 7:37-38

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 JONÁS

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Capítulo 1 

Jonás huye de Jehová 

1:1 Vino palabra de Jehová a Jonás2 Reyes 14. 25 hijo de Amitai, diciendo: 
1:2 Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. 
1:3 Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová. 
1:4 Pero Jehová hizo levantar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad tan grande que se pensó que se partiría la nave. 
1:5 Y los marineros tuvieron miedo, y cada uno clamaba a su dios; y echaron al mar los enseres que había en la nave, para descargarla de ellos. Pero Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir. 
1:6 Y el patrón de la nave se le acercó y le dijo: ¿Qué tienes, dormilón? Levántate, y clama a tu Dios; quizá él tendrá compasión de nosotros, y no pereceremos. 
1:7 Y dijeron cada uno a su compañero: Venid y echemos suertes, para que sepamos por causa de quién nos ha venido este mal. Y echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. 
1:8 Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres? 
1:9 Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. 
1:10 Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado. 
1:11 Y le dijeron: ¿Qué haremos contigo para que el mar se nos aquiete? Porque el mar se iba embraveciendo más y más. 
1:12 El les respondió: Tomadme y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros.
1:13 Y aquellos hombres trabajaron para hacer volver la nave a tierra; mas no pudieron, porque el mar se iba embraveciendo más y más contra ellos. 
1:14 Entonces clamaron a Jehová y dijeron: Te rogamos ahora, Jehová, que no perezcamos nosotros por la vida de este hombre, ni pongas sobre nosotros la sangre inocente; porque tú, Jehová, has hecho como has querido. 
1:15 Y tomaron a Jonás, y lo echaron al mar; y el mar se aquietó de su furor. 
1:16 Y temieron aquellos hombres a Jehová con gran temor, y ofrecieron sacrificio a Jehová, e hicieron votos. 
1:17 Pero Jehová tenía preparado un gran pez que tragase a Jonás; y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches.Mateo 12. 40

Capítulo 2 

Oración de Jonás  2:1 Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del pez, 
2:2 y dijo: 
Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; 
Desde el seno del Seol clamé, 
Y mi voz oíste. 
2:3 Me echaste a lo profundo, en medio de los mares, 
Y me rodeó la corriente; 
Todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí. 
2:4 Entonces dije: Desechado soy de delante de tus ojos; 
Mas aún veré tu santo templo. 
2:5 Las aguas me rodearon hasta el alma, 
Rodeóme el abismo; 
El alga se enredó a mi cabeza. 
2:6 Descendí a los cimientos de los montes; 
La tierra echó sus cerrojos sobre mí para siempre; 
Mas tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío. 
2:7 Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová, 
Y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo. 
2:8 Los que siguen vanidades ilusorias, 
Su misericordia abandonan. 
2:9 Mas yo con voz de alabanza te ofreceré sacrificios; 
Pagaré lo que prometí. 
La salvación es de Jehová. 
2:10 Y mandó Jehová al pez, y vomitó a Jonás en tierra. 

Capítulo 3 

Nínive se arrepiente  3:1 Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: 
3:2 Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. 
3:3 Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová. Y era Nínive ciudad grande en extremo, de tres días de camino. 
3:4 Y comenzó Jonás a entrar por la ciudad, camino de un día, y predicaba diciendo: De aquí a cuarenta días Nínive será destruida. 
3:5 Y los hombres de Nínive creyeron a Dios, y proclamaron ayuno, y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos.Mateo 12. 41Lucas 11. 32
3:6 Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza. 
3:7 E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni beban agua; 
3:8 sino cúbranse de cilicio hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. 
3:9 ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos? 
3:10 Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo. 

Capítulo 4 

El enojo de Jonás  4:1 Pero Jonás se apesadumbró en extremo, y se enojó. 
4:2 Y oró a Jehová y dijo: Ahora, oh Jehová, ¿no es esto lo que yo decía estando aún en mi tierra? Por eso me apresuré a huir a Tarsis; porque sabía yo que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia,Exodo 34. 6 y que te arrepientes del mal. 
4:3 Ahora pues, oh Jehová, te ruego que me quites la vida; porque mejor me es la muerte que la vida. 
4:4 Y Jehová le dijo: ¿Haces tú bien en enojarte tanto? 
4:5 Y salió Jonás de la ciudad, y acampó hacia el oriente de la ciudad, y se hizo allí una enramada, y se sentó debajo de ella a la sombra, hasta ver qué acontecería en la ciudad. 
4:6 Y preparó Jehová Dios una calabacera, la cual creció sobre Jonás para que hiciese sombra sobre su cabeza, y le librase de su malestar; y Jonás se alegró grandemente por la calabacera. 
4:7 Pero al venir el alba del día siguiente, Dios preparó un gusano, el cual hirió la calabacera, y se secó. 
4:8 Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida. 
4:9 Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte. 
4:10 Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció. 
4:11 ¿Y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?

 

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LA GAZZETTA

Vol 10, Num 7

El Pueblo
De Dios

Vea como Dios separa a su pueblo del resto del mundo y lo santifica.

Presentación en PowerPoint

Juan 6:53
Jesús les dijo:

De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. 

El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. 
Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. 

El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él. 
Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí. 

Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron;
el que come
de este pan, vivirá eternamente.


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Juan 6:44

Ninguno puede venir a mí,
si el Padre que me envió no le trajere;
y yo le resucitaré en el día postrero. 

Escrito está en los profetas:
Y serán todos enseñados por Dios.Isaias 54. 13
Así que, todo aquel que oyó al Padre,
y aprendió de él, viene a mí. 
No que alguno haya visto al Padre,
sino aquel que vino de Dios; éste ha visto al Padre. 

De cierto, de cierto os digo: 
El que cree en mí, tiene vida eterna.

Yo soy el pan de vida.

Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron.
Este es el pan que desciende del cielo,
para que el que de él come, no muera. 

Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan,
vivirá para siempre;
y el pan que yo daré es mi carne,
la cual yo daré por la vida del mundo.

John 6:44

None you can come to me,
if the Father who sent me does not draw him; and I will raise him up at the last day. 

Written is in the prophets:
And they will all be taught by God.Isaias 54. 13
So, everyone who heard the Father,
and learned from him, he comes to me. 
Not that any have seen the Father,
but the one who came from God; he hath seen the Father. 

Indeed, indeed true I tell you: 
Whoever believes in me has eternal life.

I am the bread of life.

Your parents they ate manna in the desert, and died.
This is the bread that comes down from heaven,
lest he that eats of it die. 

I am the living bread that came down from heaven; if anyone eats of this bread,
will live forever;
and the bread that I will give is my flesh,
which I will give for the life of the world.

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